En la desolación de mi vida sumido
yazco agora en mi presente.
Ya muero, ya me tienes,
siendo menos persona que nunca he sido.
Erestú, mi amada, mujer de mito
aquella que es y que me entiende,
aquella que es y no me siente,
abandonándome en la depresión de cual asilo.
El sentimiento aflora y crece
rozando ya el alto techo
del edificio central de mi cuerpo.
Ya llegó la cuna que me mece
en este mío año cero,
en este limpio, mi lecho.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Entradas populares
-
Él la miraba mientras ella seguía su camino. Solo le quedaba su espalda, avanzando en la lejanía. Habían pasado tanto tiempo juntos que ya ...
-
Hoy, en la escuela, la profesora de historia ha estado comentando levemente la trayectoria de Salvador Dalí. Un genio en la pintura, pero un...
-
- Te quiero. + ¿Qué? - Te quiero + ¿Qué? - Te quiero. + ¿Qué? - Te quiero + ¿Qué? - ¿Estás sorda? + No; solo quiero que nunca par...
-
Sentir cómo te vas desmoronando, cómo te vas haciendo polvo, mientras las olas se llevan este, poco a poco, ola a ola, hasta que no queda na...
-
La mentira golpea el alma jamás buena, jamás sana. Ahora viene, ahora ataca, y yo le digo ¡BASTA! Después vuelve y no para es cutre, e...
-
Permanece el alma dormida en su más profundo letargo, tras tanto tiempo pasado y tras tantas batallas perdidias. Pobre de ella, que por ...
-
Nosotros, los pobladores de este planeta, ¿que somos si no hacemos nada? si nacemos y nos vamos tal que así ¿qué cambió? ¿Que provocó nuest...
-
Pasan tantas vidas frente a mis ojos, cada una con su historia escrita y por escribir, cada una con sus problemas; triste o feliz; cada una ...
-
Pobre escritor, tu que anduviste los caminos del dolor, tú que superaste los problemas de la vida con el fin de vivir esta. Tú, mi escritor,...
-
Alas resguardadas, desusadas y atadas; que un día se cansan y exaltan, y rompen las cuerdas duras y blandas de la cueva que recuerdan por ha...
No hay comentarios:
Publicar un comentario